La Confederación de Estudiantes de Venezuela inició este lunes 8 de febrero en las calles de diversos estados del país, con el objetivo de denunciar la destrucción que el régimen ha emprendido contra todas las instituciones educativas del país, así como a las comunidades que hacen vida en ellas.
Los estudiantes denunciaron que tanto ellos como profesores y trabajadores viven condenados a morir de hambre en medio de una Emergencia Humanitaria Compleja, donde los salarios no superan los 4 dólares mensuales y donde las reivindicaciones estudiantiles fueron secuestradas por el régimen como instrumento de control social a través de la plataforma Patria.
Desde varios organismos del Estado encargados de la educación, los estudiantes rechazaron que el régimen, a través del usurpador ministro de universidades, pretenda priorizar carreras técnicas sobre humanísticas, sin respetar la libertad de los jóvenes en la elección de su carrera universitaria y profesional, demostrando el totalitarismo que caracteriza al gobierno ilegítimo instalado en Miraflores.
Además señalaron que la congelación de las matrículas en universidades privadas, solo pone en riesgo su sostenibilidad económica, correspondiendo al propio objetivo del régimen en replicar también en estas casas de estudio, la destrucción que han logrado con las universidades nacionales que dependen del Estado venezolano.
Los jóvenes señalaron que el próximo viernes 12 de febrero, Día de la Juventud, seguirán realizando actividades en las calles, elevando la voz de la comunidad estudiantil que en medio de la pandemia por coronavirus, sigue viendo cómo sus derechos y oportunidades son destruidas por el régimen.
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