Las organizaciones políticas Alianza del Lápiz, Centrados y Movimiento al Socialismo (MAS) enviaron una carta al presidente Joe Biden para pedir el cese de la sanciones contra la economía venezolana, con el objetivo de lograr «una política sin odios».
«Nos oponemos al conjunto de sanciones financieras que contra la economía venezolana ha impuesto el Gobierno de Estados Unidos», expresaron a través de un comunicado, en el que aseguraron que los venezolanos saben el costo de las sanciones y su impacto. «No necesitamos ser expertos en el tema, lo padecemos a diario», comentaron.
Consideran que, con el paso del tiempo se ha evidenciado que las sanciones han constituido un gravísimo error, no han contribuido al cambio político en el país y por el contrario, han agravado todavía más la durísima situación económica y social de los venezolanos.
«Las sanciones económicas han servido como excusa para que el oficialismo se atornille en el poder. No son las causa de la debacle venezolana, pero tampoco la solución. Generar más crisis no es el camino», aseveraron en la nota.
A continuación el comunicado:
Respaldamos el cese de la sanciones hacia una política sin odios
La política de odios y el odio como política le ha hecho un daño inmenso a Venezuela y debe parar.
Atacar a otros venezolanos, no a los problemas de los venezolanos, ha sido el estilo de hacer política que ha dominado la vida nacional durante los últimos 23 años con resultados desastrosos que están a la vista. Eso debe cambiar.
La política debe ser para construir, no para destruir. Las organizaciones que suscribimos este documento manifestamos nuestro claro cuestionamiento y rechazo al modelo que ha arruinado nuestra economía y convertido los servicios públicos en un desastre.
Igual nos oponemos al conjunto de sanciones financieras que contra la economía venezolana ha impuesto el Gobierno de Estados Unidos. Los venezolanos sabemos el costo de las sanciones, su impacto en nuestras vidas. No necesitamos ser expertos en el tema, lo padecemos a diario.
Con el paso del tiempo se ha evidenciado que las mismas han constituido un gravísimo error, no han contribuido al cambio político en el país. Por el contrario, han agravado todavía más la durísima situación económica y social de los venezolanos. Las sanciones económicas han servido como excusa para que el oficialismo se atornille en el poder. No son las causa de la debacle venezolana, pero tampoco la solución.
Generar más crisis no es el camino. Por eso respaldamos el llamado que en tono racional y respetuoso han elevado un grupo calificado de profesionales venezolanos ante la administración del presidente norteamericano, Joe Biden.
Apoyamos todos los esfuerzos de diálogo, acuerdo y negociación orientados a sacar a nuestro país de su actual estado de crisis permanente y reiteramos que solo las vías políticas, pacíficas y electorales son el camino para cambiar el rumbo de este barco llamado Venezuela. Asimismo, rechazamos de la manera más firme y categórica todas las campañas de odio e intentos de linchamiento moral contra los que piensan distinto. Ese tipo de conductas lo que producen es mayor división entre quienes aspiramos a un cambio político en el país. Detrás de la intolerancia se esconde el autoritarismo.
Aquellos que se dedican a generar tendencias falsas en las redes para evadir la realidad no pueden representar ningún cambio. El solo hecho que se dediquen a linchar en las redes a quienes piensan distinto, explica el porqué de sus fracasos. Si no discutimos los errores, el oficialismo va a seguir gobernando aún cuando sea minoría.La ocasión es propicia también para dirigirnos al presidente Nicolás Maduro. Aquí hay un grupo de venezolanos que tenemos profundas diferencias políticas e ideológicas con usted y cuestionamos su desempeño en el manejo del Estado; pero, estamos dispuestos a cruzar el puente de las disputas a fin de encontrar soluciones a los graves problemas nacionales.
Haga usted lo mismo. Su responsabilidad ante la actual situación de la nación es inmensa y no la puede eludir. Una contribución clave para la recuperación económica es generar un clima de debate auténticamente democrático. Sin persecuciones, ni cárcel. Es imposible entendernos en medio de un conflicto que no cesa y donde no hay respeto ni puntos de encuentro.
Presidente Maduro, libere a todos los presos políticos, ponga fin al exilio y a las inhabilitaciones. Pongámonos de acuerdo para generar las mejores condiciones electorales y así construir confianza entre los venezolanos. Discutamos cómo generar desarrollo, en vez de pobreza. ¡Venezuela es lo más importante!