De acuerdo con Joshua Goodman, corresponsal de la agencia de noticias AP, Leamsy Salazar, ex jefe de seguridad del fallecido presidente Hugo Chávez, sería el testigo estrella del presidente Donald Trump, en el litigio que inició el primer mandatario en el estado de Georgia.
Tras haber trabajado para Chávez y también para Diosdado Cabello, Salazar huyó a Estados Unidos, donde recibió asilo y protección.
Desde hace algunos días, tanto Trump como su equipo agitan la bandera del fraude e intentan que se recuenten los votos emitidos en varios estados, durante los comicios del 3 de noviembre.
Una de esas entidades es Georgia, donde la ventaja de Joe Biden sobre su rival republicano es de 14.156 votos.
Para profundizar las sospechas, Rudolph Giuliani, abogado del primer mandatario, ha puesto en duda la transparencia del software que fue empleado en las máquinas automatizadas de votación.
Según Giuliani el programa, proporcionado por la empresa Dominion Voting, fue hackeado o manipulado.
Para atizar la desconfianza, el jurista aseguró que, aunque estadounidense, Dominion Voting es una empresa creada por Smartmatic, la compañía que, por años, proveyó de software y máquinas de votación a Hugo Chávez y Nicolás Maduro.