Jhonnathan Marín, quien se desempeñó como alcalde de la ciudad portuaria de Guanta, se entregó a la justicia en Miami, por una trama de sobornos que involucra empresas petroleras conjuntas con socios extranjeros.
El régimen madurista ordenó su arresto por cargos de corrupción y le prohibió postularse para cargos públicos. Se creía que vivía en México, pero apareció en Miami el 25 de abril, donde se entregó y fue liberado el mismo día con una fianza de $100,000, según registros judiciales.
Según una denuncia penal, que no se ha informado anteriormente, Marín ayudó a pagar sobornos en nombre de un cómplice no identificado que recibió decenas de millones de dólares en contratos de las empresas conjuntas del gigante petrolero estatal PDVSA con Chevron, la francesa Total y las empresas de Rusia y China.
Como parte del esquema, entre 2015 y 2018, Marín presuntamente ayudó a transferir más de $1.2 millones de una cuenta bancaria en Miami a una en Panamá en beneficio de dos funcionarios venezolanos no identificados.
Fue acusado de un solo cargo de conspiración para cometer un delito contra los EEUU, un cargo menor que conlleva una pena máxima de 5 años de prisión.
No hay indicios en la denuncia de que alguno de los socios extranjeros de PDVSA haya participado o siquiera estuviera al tanto del esquema de soborno.
Marín, de 43 años, fue uno de los primeros adherentes al Movimiento Quinta República de Chávez y en 2008 fue elegido alcalde de Guanta, una ciudad en la puerta de entrada a la Faja Petrolífera del Orinoco, hogar de las mayores reservas de petróleo del mundo y cerca de la mitad de la producción actual de Venezuela.
Con información de AP.