“La Comisión Presidencial para los DDHH manifiesta su preocupación por el aumento de los niños, niñas y adolescentes que se encuentran laborando informalmente, sin el apoyo y la orientación de sus padres bien sea por encontrarse fuera del país o por carecer de ellos”, expresó.
Prado aseguró que el trabajo infantil posee una magnitud global y según cifras de las Naciones Unidas alrededor de 152 millones de niños se encuentran en situación de trabajo infantil, de los cuales 72 millones realizan trabajos peligrosos.
La Directora General del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (Icbf), Juliana Pungiluppi, señaló que en los primeros cuatro meses del año ya se han identificado más de 118 niños y adolescentes venezolanos migrantes en situación de trabajo infantil en la ciudad de Bogotá, siendo los menores de edad uno de los más afectados por la crisis humanitaria en Venezuela.
El Comisionado aseguró que debido a la crisis que vive Venezuela y la llegada del COVID-19, muchas familias venezolanas quedaron desempleadas y se vieron obligadas a incursar en la economía informal, viéndose forzados los menores de edad a abandonar sus estudios para ir a la calle a ayudar a sus padres.
Prado reiteró que en Venezuela la Ley Orgánica para Protección de Niños, Niñas y Adolescentes (LOPNNA) establece en su artículo 96 que la edad mínima para trabajar es 14 años, previa autorización expedida por el Consejo de Protección.
“Debido a que el estado debe garantizar la protección integral de los mismos con respecto a la explotación económica y el desempeño de cualquier actividad peligrosa o nociva para su salud física y mental”, dijo.
El Comisionado para los DDHH informó que en julio de 2019, la Asamblea General de la ONU declaró 2021 como el Año Internacional para la Erradicación del Trabajo Infantil, bajo el liderazgo de la Organización Internacional del Trabajo con el objetivo de fomentar actividades para erradicar el trabajo forzoso y de esta manera poner fin al trabajo infantil en todas sus formas antes del 2025.
Nota de Prensa