La dictadura de Nicolás Maduro designó como embajador en Irán a un militar que fue compañero de uno de los tripulantes del avión iraní retenido en Buenos Aires en junio.
Así lo muestra un documento presentado la semana pasada por la secretaria de la Asamblea Nacional, la chavista Rosalba Gil, quien comunica la propuesta de Maduro a Timoteo de Jesús Zambrano, presidente de la Comisión Permanente de Política Exterior, para que José Rafael Silva Aponte sea designado para la sede diplomática en Teherán.
Silva Aponte es un militar de larga trayectoria que participó en el intento de golpe de Estado de 1992 contra Carlos Andrés Pérez, liderado por el fallecido caudillo Hugo Chávez.
Entre 2017 y 2018 fue comandante de la base aérea El Libertador en Palo Negro, Aragua. Es allí donde se encuentra la base de operaciones de Emtrasur, la compañía estatal venezolana filial de carga de la aerolínea Conviasa, envuelta en la polémica del avión retenido en Buenos Aires desde inicios de junio.
Ambas empresas están sancionadas por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos, por presunta colaboración logística para organizaciones terroristas. La nave ahora forma parte de una investigación judicial luego que su tripulación de 19 personas, que incluía cinco nacionales iraníes, levantara sospechas.
“Nada es casualidad”, destacó en Twitter Elisa Trotta, designada por Juan Guaidó como representante de la Asamblea Nacional legítima en Argentina.
En julio de 2020, Silva Aponte fue designado como comandante general de la Aviación Militar. También ha ocupado el cargo de comandante de la Región Estratégica de Defensa Integral Los Llanos y de director de la Dirección de Apresto Operacional del Estado Mayor General de la Aviación Militar.
Además, fue edecán de Hugo Chávez. En Twitter, Silva se define como “Paladín del Espacio Soberano”.
Con información de Infobae.