El gobernador usurpador del estado Carabobo en Venezuela, Rafael Lacava, se mostró como todo «un ganador» por adornar la entrada del túnel hacia la región con murciélagos, que alumbrarían el espacio cerrado cuando el sistema eléctrico en el país se desplome, como el pasado domingo, cuando varios lugares del territorio no tenían luz.
Lacava no solo reveló una imagen de fachada de jóvenes que pintan en paredes grafitis, cuando no tienen mensajes en específico, sino que ahora da a entender que su líder, Nicolás Maduro, afloja el bolsillo para arreglar túneles -que deberían estar en perfectas condiciones- en vez de comprar vacunas para la población.
En este punto, es importante acotar que expertos aseguran que el país alcanzaría su inmunización total en varios años.
El Túnel La Cabrera, entrada al estado, además de los dos grandes murciélagos a cada costado de sus paredes, ahora luce una gigantografía con un diseño del arco del Campo de Carabobo, lugar donde se desarrolló la batalla el 24 de junio de 1821, que le otorgó la independencia a Venezuela
Entonces, ¿los murciélagos salieron como honor a la Batalla de Carabobo?
De acuerdo a lo que ha destacado el oficialismo desde comienzos de años, todos los «arreglos» y cambios en el país, por su parte, tendrían como finalidad la conmemoración de los 200 años de dicho suceso
La dictadura de Maduro se bofa de que no tiene dinero para pagar vacunas, inclusive destaca que tuvo que pedirle a sus aliados como Rusia y China para «cumplir» con las dosis de COVAX; pero este último ha hecho hincapié que todavía no se completado toda la transacción.
Pese a esto, el régimen prefirió pintar paredes. Una galón de pintura en la ciudad capital, Caracas, tiene un precio aproximado de 25 – 30 dólares (económicamente), las vacunas tienes un precio de $10, es decir, que con solo un galón de pintura, se pudieron haber vacunado dos o tres personas.
Esto lo q que fué es chulo. Aquí nadie se rinde. Q viva Carabobo 🦇🦇🦇 pic.twitter.com/qTBwyFiJrD
— Rafael Lacava (@rafaellacava10) June 17, 2021