El régimen de Nicolás Maduro rechazó el comunicado de la Caricom referente al pronunciamiento de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) sobre el referéndum del Esequibo, afirmando que mienten «descaradamente» y omiten que la instancia de La Haya, a su juicio, validó la realización de la consulta.
«La Secretaría General de la Caricom miente en forma descarada y omite intencionalmente el hecho de que la Corte Internacional de Justicia rechazó de manera unánime, la temeraria pretensión de Guyana de intentar limitar los derechos políticos de los venezolanos e impedir la realización de la consulta popular convocada por la Asamblea Nacional de Venezuela, apegada al Derecho Internacional y al único instrumento válido para abordar la controversia, como lo es el Acuerdo de Ginebra de 1966», reza una misiva de la cancillería chavista.
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Para la dictadura, es insólito que la Caricom «haga malabares» para evitar referirse al taxativo llamado de la corte, hacia el gobierno de Guyana, «a detener las acciones deliberadas de agravamiento de la situación de la controversia, entre las cuales se pueden mencionar el involucramiento del Comando Sur de los Estados Unidos y el otorgamiento de concesiones en un área marítima sin delimitar, lo cual ha generado una situación de amenaza a la paz y estabilidad de la región caribeña».
Recordaron a la Comunidad del Caribe, el «lamentable destino de organizaciones dirigidas erráticamente, como la Organización de los Estados Americanos, que bajo la influencia de Luis Almagro fue convertida en una estructura disfuncional, ideologizada, con objetivos destructivos y serviles a intereses imperiales».
Por último, hicieron un llamado a los países socios de la Caricom «a retomar la sindéresis y objetividad, alejándose de juzgamientos preconcebidos en la transnacional petrolera Exxon Mobil y el Comando Sur de los Estados Unidos, de manera de seguir garantizando una historia de cooperación, integración y paz en nuestra región».