El Gobierno Legítimo de la República Bolivariana de Venezuela muestra su absoluto repudio a la continuación de la arremetida impulsada por los voceros de la dictadura y sus títeres, miembros de la Operación Alacrán, quienes han impulsado una nueva serie de amenazas desde su írrita Asamblea contra los legítimos Diputados de la República, los Comisionados Presidenciales del Gobierno Legítimo y, sin ningún tipo de pudor, incluyendo también a las esposas de algunos de estos.
Es, más allá de un sin sentido, una absoluta falta de límites éticos el incluir a las familias de los dirigentes políticos en la ya conocida persecución de la dictadura contra las voces disidentes del país. Lo sucedido representa una nueva muestra de la falta de condiciones que existen en Venezuela para hacer política. Hoy el respeto a los derechos humanos en Venezuela no existe, y no hay ningún tipo de garantía de seguridad personal o familiar para poder elevar la voz en nombre de nuestros ciudadanos. Es a eso a lo que nos enfrentamos como alternativa democrática.
Hacemos un llamado de alerta a la comunidad internacional y a la opinión pública ante las posibles consecuencias de esta arremetida. En lo que va de año ya un parlamentario, el Diputado Gilberto Sojo, ha sido víctima de secuestro por órganos represores de la dictadura. Es necesaria una respuesta firme del mundo para detener los embates de quienes hoy usurpan el poder. Ratificamos la necesidad de alcanzar una salida política urgente a esta crisis que se agrava día tras día y que solo perjudica a los venezolanos.