evtv
Actualizados

Sendero luminoso sería el autor de ataque armado en Perú

Dieciocho personas, entre ellas dos niños, fueron asesinadas a tiros dentro de dos bares en un remoto valle cocalero de Perú donde operan remanentes de la guerrilla maoísta Sendero Luminoso, informaron este lunes las autoridades.

La matanza, perpetrada el domingo por la noche y atribuida a Sendero por el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, puede elevar la tensión en la polarizada campaña al balotaje presidencial del 6 de junio entre el izquierdista Pedro Castillo y la derechista Keiko Fujimori.

Según el gobierno, los 14 lugareños fueron asesinados en la aldea de San Miguel del Ene, en el distrito de Vizcatán del Ene (de 5.000 habitantes), que forma parte del valle cocalero conformado por los ríos Apurímac, Ene y Mantaro, conocido por su acrónimo de VRAEM y donde operan remanentes de Sendero, al que las autoridades califican de grupo «terrorista».

El Comando Conjunto dijo en un comunicado que «en el lugar se hallaron panfletos que conminaban a la población a no participar en el proceso electoral 2021», y atribuyó el ataque a una columna senderista dirigida por Víctor Quispe Palomino («Camarada José»).

«Condeno y repudio enérgicamente el asesinato de 14 personas en el VRAEM», tuiteó el presidente interino peruano Francisco Sagasti, quien ordenó «el despliegue de patrullas» militares y policiales en la zona «para que esta acción terrorista no quede impune».

La Ministra de Defensa, Nuria Esparch, prometió también que la matanza «no quedará impune» y la Fiscalía comisionó a una unidad especializada en terrorismo para llevar a cabo las investigaciones.

«Se solicitó apoyo a la Policía Nacional para efectuar el levantamiento de los cadáveres y conducirlos a la morgue del distrito de Pichari para la realización de la necropsia de ley», indicó el Ministerio Público en Twitter.

 

– Condena de la Iglesia –

 

El alcalde de Vizcatán del Ene, Alejandro Atao, y el juez de paz, Leonidas Casas, contaron a la policía que tras ser alertados de los hechos por unos vecinos en la madrugada del lunes, acudieron a los bares situados a orillas de un riachuelo de una zona de selva, donde encontraron los cadáveres, incluido el de una mujer.

Indicaron que en el lugar había casquillos de balas y panfletos que llamaban a «limpiar al VRAEM y el Perú de antros de mal vivir, de parásitos y corruptos». Estaban firmados por el Comité Central del «Militarizado Partido Comunista del Perú» (Sendero).

Casas relató que «caminando por la zona de caja [de uno de los bares] se observó una humareda verificando que provenía de cuatro cadáveres, entre ellos dos niños calcinados totalmente irreconocibles», según un parte policial.

El presidente de la Conferencia Episcopal, el arzobispo Miguel Cabrejos, expresó en un comunicado su «más profunda condena por el cruel asesinato (…) ocurrido en el VRAEM por parte de terroristas de Sendero Luminoso», la guerrilla maoísta que operó de 1980 a 2000 en forma paralela al guevarista MRTA.

«Este hecho nos recuerda la época de la barbarie y el terror que vivió el país durante más de 20 años [1980-2000], cuyo resultado fue más de 70 mil muertos y un gran número de desaparecidos», destacó Cabrejos, quien también preside el Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM).

 

– Gobierno «garantiza elecciones» –

 

Casi todos los líderes de Sendero están presos, pero sus remanentes liderados por el «Camarada José» operan aún en el VRAEM, el mayor valle de cultivos de hoja de coca de Perú, que está bajo vigilancia militar desde 2006.

Perú es, junto con Colombia y Bolivia, uno de los mayores productores mundiales de hoja de coca, materia prima para la cocaína, según la ONU.

Los encarcelados líderes históricos de Sendero, como su fundador Abimael Guzmán -condenado a perpetuidad desde 1992-, aseguran que esta facción no opera bajo su mando y rechazan lazos con el narcotráfico.

Los partidarios de Keiko Fujimori intentan ligar a Castillo con el brazo político de Sendero, algo que niega el candidato izquierdista, quien condenó en Twitter «este atentado terrorista» y pidió «que aplique todo el peso de la ley» a sus autores.

Keiko también deploró el ataque. «Lamento profundamente que nuevamente actos sangrientos estén ocurriendo en nuestro país», declaró a periodistas.

La ministra Esparch dijo que el gobierno de Sagasti, quien asumió la presidencia en noviembre de 2020 en medio de una crisis política marcada por tres presidentes en cinco días, «garantiza el desarrollo de las elecciones libres, transparentes y ordenadas».