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Colombia erradicó en 2021 menos narcocultivos de lo que esperaba

El gobierno de Colombia anunció este lunes que en 2021 erradicó 105.000 hectáreas de narcocultivos, por debajo de la meta de 130.000 hectáreas destruidas que se trazó para este año.

«Tenemos una cifra muy importante, 105.000 hectáreas, a pesar de que nos tocó sacar a los erradicadores (de cultivos) en la época de los paros especialmente por los bloqueos y el vandalismo», dijo el ministro de Defensa Diego Molano desde el municipio de Carepa, en el departamento de Antioquia (noroeste).

La cifra es inferior a la del 2020, cuando el gobierno aseguró haber erradicado 130.000 hectáreas de hoja de coca, resultado récord hasta ese momento.

El ministro relacionó el incumplimiento con las masivas protestas que estallaron en abril contra el gobierno de Iván Duque y se extendieron tres meses con jornadas más intensas que otras, bloqueos y choques con la fuerza pública que dejaron casi 60 muertos.

Colombia tiene la mayor área sembrada de narcocultivos del mundo por delante de Perú y Bolivia, mientras Estados Unidos es el mayor consumidor de cocaína.

Según la ONU, en 2020 el país tenía 143.000 hectáreas de plantíos de coca y una capacidad de producir 1.228 toneladas de polvo blanco.

Aún se desconocen las cifras de los sembradíos detectados en 2021, que por lo general se publican a mitad del año siguiente.

El ministro Molano aseguró también haber alcanzado este año una «cifra récord en incautaciones: 650 toneladas de clorhidrato de cocaína».

Aunque el gobierno se felicita por los resultados, el total de cultivos se ha reducido apenas un 7% entre 2019 y 2020, según la ONU.

Expertos estiman que la resiembra alcanza en promedio cerca del 50% de las hectáreas arrancadas a la fuerza.

El presidente Duque (2018-2022) quiere reactivar la aspersión aérea con glifosato, una iniciativa aplaudida por Estados Unidos, pese a la oposición de campesinos que alegan daños a la salud humana y el medioambiente.

Las fumigaciones con este herbicida fueron suspendidas en 2015, por decisión del entonces presidente Juan Manuel Santos (2010 – 2018) en atención a una advertencia de la Organización Mundial de la Salud que considera a ese producto como «posiblemente» cancerígeno.