El gobierno británico anunció el viernes que impuso sanciones a 30 entidades o personas de 11 países, entre ellos Nicaragua, Irán y Rusia, por «oprimir las libertades fundamentales en todo el mundo».
«Es nuestro deber promover sociedades abiertas y libres en el mundo. Hoy nuestras sanciones van más allá para exponer a quienes están detrás de las abominables violaciones de nuestros derechos más básicos», declaró el ministro británico de Relaciones Exteriores, James Cleverly, citado en un comunicado.
Las sanciones se dirigen a «individuos corruptos, a quienes han violado y abusado de los derechos humanos y a quienes han cometido actos de violencia sexual en conflictos», detalló el ministerio.
Londres aprobó en 2018 una ley que le permite aplicar sanciones (prohibición de entrada, congelación de activos) a personas acusadas de violaciones de derechos humanos en el extranjero.
Ocho personas fueron sancionadas en esta ocasión en virtud de dicho régimen.
Entre ellas figuran Sadrach Zeledón Rocha y Yohaira Hernández Chirino, el alcalde sandinista y la vicealcaldesa de la localidad nicaragüense de Matagalpa por haber «participado en la promoción y el apoyo de graves violaciones de los derechos humanos».
La lista incluye asimismo a un líder religioso paquistaní, un general ugandés y cuatro funcionarios rusos.
Bajo otro régimen, relativo a actos de violencia sexual en los conflictos, Londres también sancionó a diez oficiales iraníes vinculados al sistema judicial y penitenciario de ese país, a seis responsables de Sudán del Sur, a un grupo armado de Malí y a miembros de la junta birmana.
Por último, una serie de individuos de Serbia, Moldavia y Kosovo vieron sus activos congelados y su entrada prohibida al Reino Unido por corrupción.
AFP