Este martes, la religiosa Mary Margaret Kreuper, exdirectora de la escuela católica St. James, de 79 años, fue acusada de un cargo de fraude electrónico y otro de blanqueo de dinero.
Kreuper aceptó su culpa y se responsabilizó por el desvío de miles de dólares provenientes de las cuotas de los alumnos y donativos, los cuales utilizó en juegos de casino y compras.
Por más de 10 años esta monja utilizó el dinero que administraba en la escuela católica St. James, en Los Ángeles, para actividades mundanas.
Se pudo determinar que el robo de fondos de la escuela asciende más de 835,000 dólares.
Los cargos por los cuales se le acusan conllevan una pena máxima legal de 40 años en una prisión federal.