El secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, no descartó que Rusia intente interferir en las elecciones presidenciales de 2020.
Al ser consultado sobre el tema, el jefe de la diplomacia estadounidense indicó que la posibilidad de una intromisión rusa existió en el pasado y que seguirá existiendo en el futuro.
Pese a su ligereza, el secretario de Estado aseguró que Estados Unidos empleará todos sus recursos para evitar que Moscú pueda afectar el resultado de las próximas votaciones.
De acuerdo con un informe elaborado por el fiscal especial Robert Muller, El Kremlin jugó un papel importante en las elecciones de 2016, al inclinar la balanza a favor de la candidatura del actual presidente, Donald Trump.