La Organización de las Naciones Unidas (ONU) manifestó su preocupación por los ataques contra migrantes venezolanos en Iquique, al norte de Chile, y los condenó «categóricamente», señalando que ninguna persona merece ser discriminada.
El pasado domingo, en Iquique, miles de personas manifestaron en contra de la inseguridad y la protesta terminó con el ataque a un campamento de migrantes venezolanos. Eduardo Stein, enviado especial para la crisis migratoria venezolana del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (Acnur) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), aseguró que «estos actos de violencia van en menoscabo de los Derechos Humanos» y pidió que no se repitan.
A pesar de sus declaraciones, alabó la labor de comunidades como la de Iquique al abrir sus puertas «de manera incondicional» a los migrantes, «que llegan en situación de extrema solidaridad», y abogó por «no dejar solas» a estas comunidades para que no asuman ellas toda la carga que supone acoger a quienes siguen llegando.
Chile contabilizó en 2020 alrededor de 1,4 millones de migrantes viviendo en su territorio, que suponen un 7 % de la población, según cifras oficiales.
Con información de Diario de Las Américas.