Roberto Calcaño, fisioterapeuta y quien se vio envuelto en el incidente con el director de la Cruz Roja de Venezuela, Ricardo Cusanno, reveló todos los detalles en el programa El Citizen, conducido por Leopoldo Castillo, sobre lo ocurrido en el Club de Playa Azul, ubicado en Naiguatá, estado Vargas, ubicado al centro norte de Venezuela.
«Ocurrieron una cantidad de hechos en la noche del 31 de diciembre al 1 de enero, donde yo estaba con mi familia… …Yo conozco a este señor (Cusanno) desde hace muchísimos años, todo el conflicto empieza cuando él ve que yo estoy en el club. Se aproxima a mí y me comienza a amenazar…Tuvimos una relación comercial desde hace muchos años, donde se invirtió una cantidad dinero, pero quebramos…», detalló Calcaño durante la entrevista.
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Asimismo, reveló que desde hace tiempo el líder de la organización sanitaria venezolana lo presionaba para recuperar el dinero que habían invertido.
«Tenía 15 años que no iba a Venezuela, y justamente en la fiesta de fin de año coincidimos en el club, donde me amenazó con matar a mis hijas y con que no iba a salir vivo del país».
De acuerdo con Calcaño, el inconveniente se produjo cuando él se queda solo en la mesa en la que se encontraba junto a familiares, y Cusanno empieza a señalarlo. «Luego se aproxima sin mediar palabras y me mete una cachetada y una patada en sus testículos», relató.
«Caigo al piso, me levanto… …Mi familia corrió directamente hacia donde estaba Cusanno para confrontarlo y él estaba completamente ebrio».
El director de la Cruz Roja venezolana, Ricardo Cusanno, señaló a la esposa de Calcaño y la amenazó con matar a sus hijas cuando ella se dirigía le estaba hablando a él. Cusanno intentó pegarle y la lanzó al piso.
«Al ver eso yo le lancé un vaso de metal y se lo pego en la cara, y el señor empieza a sangrar», agregó Calcaño.
Previamente, Cusanno había emitido un comunicado a través de sus redes sociales denunciado que había sido víctima de Calcaño en el lugar mencionado, porque cobrarle una deuda que supuestamente el fisioterapeuta le debía desde hace muchos años, y desmintió encontrarse en estado de ebriedad y haber agredido a Roberto.