El reconocido caso de Óscar Pérez fue llevado por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) por el excesivo uso de fuerza por parte del régimen en el operativo que llevó a su muerte.
Pérez era un agente activo del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC) quien fue asesinado por el régimen de Venezuela en el año 2018.
Además del caso de Pérez, también se llevó el de las otras seis personas que lo acompañaron aquel fatídico 15 de enero.
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Los fallecidos presentaron cada uno un tiro de gracia y antes de ser ejecutados se divulgaron videos en donde ellos expresaban estar neutralizados y dispuestos a entregarse.
La CIDH también señaló una evidente violación de derechos de las familias al no permitir realizar los correspondientes servicios fúnebres de acuerdo con sus creencias para despedir a sus seres queridos.